“Cada vez que me miro en el espejo
Miro mis horas llegar...
Llamaré a Darvulia
Para que me haga una razón
Para yo amar...
Quiero ser joven...
Quiero ser bella...
Quiero esa sangre...
Que todo embellezca...
La Vieja
Bruja me convenció y fuimos en
mi negro carruaje dónde las vimos pasar
Las llevamos al Castillo...
Donde no salieron jamás.
Condesa Sangrienta me llamaban
De la sangre de niñas vírgenes
Me alimentaba...
Pasó el tiempo...
Mi piel se va arrugando...
Y la Bruja nada a experimentado...
Salí del Castillo cabalgando en mi caballo
Y fui a gritarle a la Luna
¿¡ por que me hace daño!?
Sólo quiero juventud...
Quiero ser bella
Quiero ser una dama
Que nunca envejezca
Dime Lilith...
Diosa del Amor y de la Belleza
Dame tu poder...
Para poder ser siempre bella...
Con furia contenida y sin respuesta
Me fui al Castillo dónde
mi baño de sangre me espera...
Torturé a más chicas..
Las tuve que matar
Por que los ineptos de mis sirvientes
No pudieron acatar:
“¡¿Cómo no saben si esta viva?!
ponle esa moneda ardiendo
y verás que sigue con vida..
Dame eso!!
Lo haré yo...
Estúpidos... imbéciles...
Ven que estaba viva...”
Una sonrisa iluminó mi rostro
Era tan alentador quitarle su último suspiro
Era como haber corrido muchos kilómetros
Y me dejaba sin respiro...
Esa noche...
La noche que nunca pensé que llegaría
Los gritos de las chicas
Dejaron que el Rey
Viera lo que allí sucedía..
Yo estaba sentada viendo a Mi doncella de Hierro
Torturar a una última víctima...
Apresaron a mis sirvientes
A un infierno que nunca pensaron que vendría.
Supliqué hacia mi Señor
Y les dije que nada malo era
Tener como belleza mi ser exterior...
Me castigaron por lo que temía
La oscuridad y el encierro
No quería...”
Ersebeth-Bathori
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