LUNA DE BENZEDRINA HECHA EN CASA
Prometo no volver a hacerlo,
solo deténganlos,
háganlos guardar silencio,
paren todo,
todos los sonidos,
en especial
la sonrisa que se convierte carcajada,
la voz que escucho adentro
y no es la mía
que me provoca un dolor de cabeza
por donde creo quiere salir
LIMPIEZA GENERAL
No puede exorcizar de manera definitiva
a los demonios que habitaban en mí,
de nuevo han tomado el control,
ahora aumentando la esquizofrenia visual
auditiva,
corporal,
los veo en cada cosa
o corriendo desenfrenados
durante días,
apareciendo y desapareciendo al azar,
crecen con degeneraciones triviales,
disfrutan mi angustia
auto inflingida,
me hacen sudar un hilo frío;
saben que lo han logrado otra vez,
No temo por mi bien,
sino por todo el mal que puedo crear
y en el que me puedo convertir
en un momento cumbre de desesperación
Será mejor que no sepan mis intenciones
y antes de salir
me ponga el disfraz diario
con la cara pintada de ser inofensivo,
de no querer molestar,
aunque por dentro
gotee un insano ardor;
ignórenme a más no poder,
pasen desapercibidos
los momentos de paranoia
que seguro reflejan los ojos,
presiento que con las horas será peor,
encerrado
mirando la tele
o con una mujer,
será igual,
porque al terminar la noche
y no haya más de que hablar
se apagarán las luces,
el mundo estará en santa paz dormido
mientras yo escucho mis lamentos,
impedido para alegar demencia,
lamiendo cada herida
sin permitir a nadie ver
lo carcomida que está el alma.
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